Días especiales

 13-Nov-18

Cumplir años... felicitaciones, pasteles, llamadas, cortesías, clichés... 

De todo lo mencionado, ya no se sabe si la gente te felicita por hacerlo (porque una red social te invita a realizarlo) o porque realmente le importas, que al fin y al cabo, para mí, es igual, si te importa alguien o si le importas a alguien va a estar ahí todo el año, presente, aunque esté lejos, no se requiere un regalo, un escrito especial, absolutamente nada. 

Y para recalcar algo importante, cabe decir que todos los días deberían ser especiales, todos los días deberías sentirte como que cumples años (lo haces), la vida te brinda vida, justo así, y si todos tus días no son especiales, entonces debes preguntarte: ¿qué estoy haciendo con mi vida?

Todos los días deberías hacer lo que te apetece, lo que pide tu corazón, y organizarte tu vida basado en ello, para que cuando llegue el día del año en el que naciste sea sólo un plus en tu año fantástico de tu fabulosa vida. La vida se vuelve fabulosa no por las cosas, o por los objetivos concretados, la vida es extraordinaria gracias a la felicidad, y esta escabullida emoción sucede cuando deseas que suceda, inmediatamente, facilmente, sólo requieres SER feliz, y lo demás, lo demás, los objetivos, los éxitos, la pareja, la abundancia, y las intenciones que tengas, llegan por sí solas mientras haces lo que haces, por amor al arte, por amor a la vida, por amor a ti mismo, qué buena forma de vivir, ¿no lo crees?

Vive.

Para los nativos australianos, el único momento de celebrar el "cumpleaños" es cuando la persona siente que ha avanzado, aprendido, evolucionado, lo suficiente en un año o poco más como para poder celebrar simbólicamente algo especial, y sólo la persona puede decidir cuándo. Es curioso, pero sin duda es especial.

No digo que no disfrute que la gente se acuerde de mí y me felicite, lo agradezco bastante. Muestras de amor nadie las puede rechazar, sería un tonto. Lo que digo es que prefiero estés presente el resto del año, de la vida, y así, poder disfrutar lo más valioso que hay: la convivencia incondicional.

Todos los días son especiales, todos los días son una oportunidad, obsérvalo, siéntelo, y sabrás. 

Aprovecho para agradecer a la vida por un año más --formal--, porque he creado y recreado una vida que amo y que no cambiaría. Gracias... totales.