Ensayos de las transgresión

Siempre lo raro va a estar catalogado cómo negativo. Es el trabajo de la sociedad.

La hipnosis colectiva es el mayor acierto de la humanidad, no el descubrimiento del fuego.

Me subestimas sin conocerme, sin saber, ese es el error de la arrogancia sin saber que ya ha perdido.

Las apariencias es el hábito de la des-apariencia. 

Lo menos que pueda parecer.

Qué cansado es tener que pensar en todas las puntuaciones necesarias para escribir apropiadamente y acorde  a las de las academias , quiero escribir con pura coma, sin puntos, y que tú interpretes las letras a tu antojo.

Porque aún usando la puntuación y todo, la interpretación es extremadamente subjetiva, y probablemente esté equivocada.

Demasiadas reglas, demasiados condicionamientos. Qué complicado es acordarme de todo.

Es lo que dificulta un poco ser absolutamente tú. 

Este mundo es todo lo que tenemos y todo lo que conocemos en esta vida, además de nuestro cuerpo y nuestra mente . Todo lo demás es prestado, el cuerpo también, así que nada más nos queda la mente, y lo invisible, todo aquello que no se logra ver, pero que sí existe. 

Las respuestas no están en otro planeta, las respuestas se han encontrado siempre dentro de ti.

Quiero hacer sacrificios en mi vida sin perderme, sin perder mi naturaleza, mi libertad o rebasar la delgada línea que existe entre la conciente generosidad y el pendejismo.

Quiero hacer lo que quiero hacer porque es lo que me hace feliz y sonreír. Quiero hacer lo que me hace feliz porque es lo que me hace sonreír.

Quiero hacer lo que vaya en favor del dinamismo y el flujo natural, no tener que ir forcejeando contra la espontaneidad.

Quiero abrir mi corazón sin que sea lastimado, sabiendo que quiere merece sentir mi amor, sabrá que es merecedor de ser cuidado con extrema cautela y atención.

Ya no quiero hablar en este libro de romance o relaciones personales, quiero escribir sobre otras cosas, sobre más cosas, sobre lo que sienta ahora mismo o lo que voy a sentir mañana. Sobre lo que sentí hace muchos años, o sobre lo que me gustaría sentir en el futuro. Pero siempre, siempre, que sea sobre lo que se siente. 

Hay una relación interpersonal perpetua de la cual te puedes haber olvidado: la tuya. Tu relación contigo. 

¿Cómo se siente? 

Gratitud. Esa es una sensación sobre la que me gustaría escribir: por todo lo que he pasado y por todo lo que ya sé que pasaré. Y claro, por aquellas sorpresas inesperadas maravillosas, y por aquellas que me harán crecer.

Hay mucha gente despierta compartiendo la semilla del pensar. Aquella que invita a la tierra fértil de la mente a regarse y florecer. 

Solo yo puedo cuidar de mi semilla. Si la cuido bien, podría tener una selva cómo la del Amazonas. 

Qué gran aventura sería recorrerla, ¿No te emociona explorar tu selva? 

¿Qué cosas te podrías encontrar? 

La flora y la fauna de cada lugar fueron determinadas por una suma de circunstancias perfectas, que concluyeron en el infallable equilibrio entre la naturaleza otorga y la vida que toma. 

¿Qué determinó que Yo existiera?

¿Qué determinó sin determinismo mi existencia?

¿Quién determina las determinaciones de la vida?

¿Soy yo o son las reglas establecidas?

El determinismo es limitante, así cómo emitir un prejuicio. Te limita la posibilidad de expandirte, así cómo el prejuicio limita la posibilidad de conocer a alguien. 

Una simbiosis humana, de los seres más pensantes, inteligentes y avanzados de la Tierra (según apariencia). Una simbiosis que no logramos alcanzar, y que hasta el más pequeño insecto, con la más ínfima consciencia sí practica, y con extrema facilidad.

La simbiosis humana es un buen objetivo a alcanzar antes de que se nos agote el Sol, el Sol, no nuestro Sol. No es nuestro. No es de nadie, el Sol nada más está ahí, paseándose por el cosmos. Da la casualidad que ilumina nuestro planeta con su existencia regocijante. 

¿Qué es realmente tuyo?

¿Qué es lo que no es tuyo?

¿Qué puedo hacer con lo que poseo y de qué puedo deshacerme? 

¿Es posible deshacerse de las personas? No me refiero a desaparecer a alguien, porque esa persona vivirá contigo a perpetuidad. Me refiero a olvidar/dejar atrás —ahora—, porque te lastimaron, porque lastimaste y se fueron, o porque simplemente ya no están estando aquí, enfrente de mí.

¿Cómo me deshago de la necesidad de estar aquí? 

¿Es posible deshacerme de mis limitaciones, de mi determinismo autoimpuesto, de la hipnosis social?

¿Quién determina lo posible de la posibilidad?