Ensayos sobre la transgresión

¿Por qué será que se protege demasiado a los hijos, a la hijas menores? ¿Habrá algo en nuestra genética que nos lleve inconscientemente a asumir que por ser los menores deben ser personas frágiles, incapaces e inútiles? Que tenemos como padres tener que andarles resolviendo la vida, protegiéndolos de lo que para nosotros es un peligro, de los ideales que no respetamos, de las opiniones con las que diferimos, de las carreras profesionales que no validamos, de las amistades que no creemos sean las correctas, llenando la mente de mentiras transmitidas de generación en generación, solo porque tengo miedo de que seas tú desde pequeña y que con ello, te expongas al desastroso mundo real, y así, acabes rota, desprotegida, lastimada, destruida, lo cual seguramente sucederá precisamente por el hecho de que lo has sobreprotegido demasiado, y no puedes hacerlo toda la vida, llegará un momento en que deba enfrentarse en soledad al mundo, y entonces has de preguntarte, Madre, Padre, ¿le he dado las herramientas necesarias para pensar, para resolver, para crecer? o, me la pase simplemente imponiendo mis ideas en la burbuja de mi mundo para evitar que se enfrentara al mundo al cual se iba inevitablemente tener que enfrentar en algún momento, así que pregúntate, ¿estoy generando un beneficio al sobreproteger a mi descendencia?

La respuesta es no, la verdad es que estás creando un parásito de la sociedad, un individuo que no sabe hacer nada, que no quiere hacer, que todo lo quiere regalado y que no está dispuesto a mover un dedo por obtener lo que quiere, porque todo se lo has dado, porque has atendido a sus berrinches, has resuelto tus problemas, te has entrometido en todos los aspectos de su vida, has formado el perfecto molde de ti, solo que uno inútil, que no sabe hacer, ni pensar ni resolver nada, nada,

Por alguna razón, se protege demasiado a los menores, como si no tuvieran lo necesario para salir adelante, para ser mejores, para trascender, crecer, y sobrepasar al mayor, al padre, al abuelo y a todo el linaje, ¿o será que no se quiere que eso suceda?  No lo creo, ¿o será apego inconsciente a conservar al menor como un infante para siempre? Lo que sea que sea, no le hace un favor, al contrario, le jode masivamente la vida.

Y por supuesto, no sucede siempre, ni sucede con todas las familias, pero es un patrón, es lo común, en las votaciones actuales lleva la delantera en todas las encuestas.

Yo no deseo tener hijos, pero si los tuviera, tal vez desde la conciencia presente de esta problemática podría resolverla, y probablemente le exija más al menor, porque es de la que menos se espera,,, es así la sociedad, ¿no? 

¿Por qué no deseo hijos? Hace unos 15 años soñaba con tener 3 hijos, lo visualizaba en mi futuro, sin embargo, ahora que observo con atención el mundo, ahora que me conozco mucho mejor, ahora que sé lo que quiero y lo que no, lo que me gusta y lo que no, sé que no es viable tenerlos, que el mundo cada vez está peor, lo hacemos peor, y cómo podría pensar en traer a alguien este mundo donde un día el problema es la extinción por guerra nuclear, al otro por manipulación genética, el siguiente a causa de la inteligencia artificial, por sequía, cambio climático drástico, por atrocidades fabricadas por la misma humanidad, ¿cómo le explico eso a un infante? Que estamos dementes, que somos idiotas, que jugamos con la válvula del gas y con el mechero, y que no tenemos ni la más puta idea lo que hacemos, aunque se pretenda grotescamente que sí,

No, no deseo eso para los infantes de nadie, mucho menos los míos, y suponiendo que nuestros recursos se estén tornando limitados, ¿cómo decido egoístamente traer más gente al planeta cuando lo que hay para los que estamos no está alcanzando? Solo porque yo tengo la necesidad egoísta de tener hijos, de tener muchos, de tener varios, sin pensar ni un solo segundo en el impacto global que eso implicaría,

Claro, puedes decidirlo a conciencia y es respetable, al fin y al cabo, aquí todos tenemos libre albedrío, lo que no es útil es que ni siquiera contemples la consecuencias de tus actos, y que en esa falta prives al mundo de hacer algo al respecto para disminuir el impacto, sin siquiera incentivar la posibilidad de un verdadero cambio.

Traer hijos al mundo es natural, es parte del ciclo de ser humanos, sin embargo, la diferencia de la naturaleza animal con la naturaleza de la humanidad es que nosotros pensamos, ellos no, por lo tanto podemos observar, discernir, reflexionar, maniobrar, valorar, decidir, el animal solo sigue sus instintos, su ADN, lo cual pareciera que también nosotros como humanos replicamos, cuando somos demasiado perezosos para usar la cabeza, lo cual es más común que los granos de arena,

¿Y qué si yo estoy privando al mundo del próximo Einstein, la próxima Virginia Woolf? Para empezar, para poder cambiar al mundo de manera radical, de maneras profundas, definitivas, duraderas y beneficiosas para toda la humanidad, para todos los seres vivos, tiene que acabarse la codicia, ese es el problema, la raíz causal de todas las catástrofes actuales, y la codicia tiene recursos suficientes(ilimitados) para aguantar miles de años, tiempo que la humanidad no tiene, tiempo que tu infante no tendría, así que como verás el chiste se cuenta solo, y la solución se encuentra en el problema mismo,

Codicia,

Resistencia a la alteración del Status Quo,

 

No puedes resistirte al cambio, bueno sí, pero aunque te resistas, vendrá, ya sea para bien, ya sea para mal,

El cambio comienza con un paso, el tema es que si todo alrededor se enfoca en evitar que se dé ese paso, que sea sólido y que no tengas que dejar de andar, es imposible siquiera darlo. 

Tal vez haya que aprender a volar para poder salvarnos,

Para mí, egoístamente, así como decido traer hijos, decido no traerlos, lo más difícil de decidirlo, como dije, egoístamente, es perder mi libertad e independencia, porque entonces mi vida ya no es mía, y sucede para y por la vida de alguien más. Así que por ahora, a conciencia, decidiendo, con todo lo implicado, decido ser egoísta y no tenerlos, sabiendo, aceptando y con ello, maniobrando sobre el sendero de mi paz, de mi felicidad, de mi amor por la vida, y de lo que (tal vez) es lo mejor para la humanidad,